Disfruta de la experiencia con tus cinco sentidos... la aventura no ha hecho más que empezar. Estamos en Bahía de Uvita, Costa Ballena, Costa Rica. Biología tropical, cocina y arte, los metemos a la batidora... y tenemos nuestro club rural, refrescante y sabroso... ven a disfrutar de nuestros atardeceres!

martes, 10 de agosto de 2010

Visitas de amigos, sustos y biología tropical


8 de Agosto de 2010, Costa Ballena.

Muchas cosas seguidas: visitas de amigos, sustos, y biología tropical.



La verdad es que las últimas semanas entre disgustos, trabajo, vida social y preocupaciones varias, se nos han pasado volando.


Se nos fue el Marquito y para secarnos las lágrimas llegaron Pati con su Edu y su amiga Sonia.
Y casi se nos pierden entre la playa y el manglar una oscura noche cruzada de relámpagos. Les llevamos a ver la cola de la Ballena en marea baja y con atardecer incluido. Y encontramos muchos cangrejos, y erizos irregulares (del tipo logo FIVE SENSES), y Pati me contó que le encanta enseñar biología a adolescentes descerebrados. Y Sonia me confió sus sueños aventureros que espero lleve a cabo algún día. Y su Eduardo comprendió pronto porqué vivimos nosotros aquí.

Y llegó Dora desde México, con sus historietas de la Bayer, nuevas experiencias de la Hipertensión Pulmonar, recuerdos de ex compañeros, anécdotas de clientes conocidos, y ganas de descansar. Y me puso al día de cómo estaban las cosas en Bayer Barcelona desde que yo las dejé y me alegré mucho de no estar más allí.
Y llevamos a Dora a bañarse en las cascadas y había demasiado agua, y la Lula se cayó por una cascada abajo (señores, más de 10 metros de altura con 5 escalones de pura piedra y agua) y casi nos mata del susto. Sin embargo ella salió nadando como si nada, y pegó cuatro saltos montaña arriba y ya estaba en la poza de arriba otra vez, en la otra orilla contraria, claro. Y yo, tres pozas más abajo llamándola a gritos sin saber donde estaba. Así que Eduardo se metió en la poza y la agarró para cruzar de vuelta. Vaya con la señorita Lula, hizo lo mismito que hace un año cuando la compramos con cuatro meses, lo que con mucha más corriente y mucho más caudal de agua… La primera vez tuvo suerte, la cogimos al vuelo… pero en esta ocasión… cascadas abajo con cara de susto. Creo que no se le va a olvidar ser más precavida en sus baños en aguas dulces.

Y todos mis amigos españoles me confirmaron lo supuesto. Que España cada vez está peor. Y que mucha más gente despedida, y mucha más crisis, y miles de embargos de viviendas y vehículos por los bancos. Y mucha desesperación. Familias enteras sin un solo sueldo.
Y me alegré de no estar allí para sufrirlo.
Desde aquí no nos enteramos de mucho más que del famoso Mundial de Fútbol que España ganó frente a Holanda. Nosotros lo vimos en el único restaurante español que hay en 50 km a la redonda, entre muchos ticos y los propietarios españoles. Vibrando de indignación casi todo el rato y saltando de alegría interminables minutos después.

Y Dora paseó por la playa, cenó unos spaguetti abundantísimos, se manchó la falda blanca por retreparse por nuestros caminos de la jungla, y se mojó bajo el aguacero de invierno tropical. Y espero que esas gotitas de lluvia pudieran arrastrar parte del estrés que provoca un puesto de Marketing Manager Regional para toda Latinoamérica. ¡Qué chica más fuerte!

Y así fue como conocí mejor a Pati, a Sonia, a Edu y a Dora. Y qué bueno haberlos conocido así. Espero que volvamos a encontrarnos y repetir esa barbacoa.

Y he empezado a centrarme en mi faceta de marketiniana, colaborando con una revista turística local. Y metiéndome en la biología costarricense, con un poco de ecología de los arrecifes de coral y los manglares. Haciendo mi primera colección de plumas de aves (Arantinga finschi, ver ejemplar en la foto) y reclamando la atención sobre la educación ambiental en la zona. Y así sigo aprendiendo, vuelvo a estudiar, y me vuelvo a interesar por muchas de esas cosas que me emocionaron en mis años de estudiante de biología. Y retomo los sueños de antaño, trabajar por, para y en la naturaleza, con lo justo para disfutar de lo que me gusta y hacer disfrutar a los demás.
Y la semana que viene llega mi exprofesor de Conservación de la Fauna y Presidente de SEO-BirdLife, el Dr. Eduardo de Juana, y me hace mucha ilusión encontrarle aquí y contarle que estoy a punto de hacer realidad el sueño.

Y además hemos aprendido que NUNCA se debe cruzar por el manglar, con perros o sin ellos, y menos en esta época en que estos reptiles están en celo. Sobre todo, si la zona en concreto se llama Punta Lagarto, es por algo.

Buenas tardes para todos con los pajarillos cantando y los monos aullando.

Susana